El pan pita es uno de los alimentos más antiguos cuyo origen se lo atribuye a medio oriente, especialmente a Egipto, siglos atrás La pita, más conocida por ser de esa especie de panes planos, también tiene sus raíces en ciertas regiones de Grecia, de la India y de África y al ser uno de los alimentos milenarios de esa región del mundo refleja muchas de las costumbres y tradiciones de algunos de estos países. En algunas culturas de África, por ejemplo, es utilizado como una especie de tenedor el cual sirve para que la comida sea llevada a la boca, en regiones más cercanas al Mediterráneo en cambio se usa como una especie de platillo que sostiene y soporta el resto de los alimentos.

De 6 a 10 porciones:

• 500 g de harina de trigo todo uso
• 30 cl de agua templada
• 1 sobrecito de levadura seca de panadería (11g)
• 1 cucharita rasa de sal
• 1 cucharita rasa de azúcar

1. A mano: en un bol, mezcla la harina, la sal y el azúcar. Haz un hueco en el centro y añade la levadura y la mitad del agua. Amasa y añade un poco de agua de vez en cuando. Añade la masa a un gran cuenco. La masa debe quedar lisa y no debe pegarse a las paredes del cuenco. Deja que la masa doble su volumen en el cuenco cubierto con un paño en un lugar preferiblemente caliente.
2. CORTA LA MASA: Una vez tengamos nuestra masa lista, córtala en 8 pedazos.
3. ESTIRA LA MASA: Estira cada pedazo en un círculo de unos 15 cm de diámetro. Coloca el primero sobre un paño limpio, cúbrelo con papel parafinado y ve apilando el resto según los vayas estirando. Cubre todo con otro paño y deja reposar 15 minutos.
4. COCCIÓN: Calienta una sartén a fuego fuerte o alto y sin materia grasa. Coloca un primer círculo de masa. (Poco a poco irá hinchándose).
5. DALE LA VUELTA: Dale la vuelta al cabo de 2 minutos, deberá quedarnos dorado por ambas partes.
6. FIN DE LA COCCIÓN: Ve poniendo los panes ya hechos en una rejilla y cúbrelos con un paño limpio.